miércoles, 31 de octubre de 2012

La vuelta de Obligado. Aire de triunfo

Letra de: Miguel Brasco
Música de: Alberto Merlo
Interprete: Alberto Merlo

Día de la Soberanía Nacional


En 1845 defender la Soberanía Nacional significaba obstaculizar los ríos con cadenas para decirle a los imperialistas y a sus lacayos, NO PASARAN. La Bandera Azul y Blanca, pequeños cañones en las riberas del Paraná, escasos soldados y gauchos en montonera para impedir los desembarcos.
Vuelta de obligado es el símbolo pero no fue solo allí donde se defendió la patria. En cada recodo del río se libraron combates.
.El 20 de noviembre de 1845 venían por la economía de la Confederación Argentina con el pretexto de la libre navegación de los ríos y el enojo por los derechos de aduana que debían pagar.
Las invasiones inglesas, el bloqueo al puerto de Buenos Aires y finalmente la aventura de internarse por nuestros ríos interiores fueron las aventuras bélicas  pero como dijera Lucio V Mansilla, NO LO CONSEGUIRÁN IMPUNEMENTE.
Y tronaron los cañones, crujieron las cadenas, pasaron, pero debieron volverse con la cabeza gacha.
Hoy en el siglo XXl defender la Soberanía Nacional pasa por otro lado.
Los enemigos siguen siendo los mismos tanto los imperialistas como los lacayos locales, sus objetivos también,  pero las armas para enfrentarlos son otras.
Lo único que no cambia es el patriotismo que debemos sentir para defender nuestro suelo.
Lo único que no cambia es entender que la Patria es el pueblo, que sin Pueblo no hay patria, sin pueblo no hay historia, sin pueblo no hay bandera, sin el pueblo no hay epopeyas dignas de ser contadas.
Porque estar con el pueblo es sin lugar a dudas lo mejor que le puede pasar a alguien destinado a regir su destino, sin  tejer turbios manejos con la complicidad de la noche sino a la luz del sol forjar un futuro mejor basado en un presente mejor.
Eso es defender al pueblo. Eso es defender la Soberanía Nacional.
¡¡Viva la Patria, carajo!!!

                                                                                                                                       Edgardo R Ieraci

Día del militante


La voz inconfundible de Ariel Delgado informaba desde Radio Colonia, en la república Oriental del Uruguay, que se acercaba el avión negro.
Incógnita para la gente joven de hoy, no tanto para la de ayer y menos para los adultos.
Con la única y fundamental diferencia que a algunos les creaba expectativas, esperanza y a otros odio y desazón.
El avión negro en la primer parte de la década del 60 era una leyenda urbana. Alimentada por algunos medios de difusión y por el boca a boca ciudadano, recordemos que aún estaban muy abiertas las heridas provocadas por la llamada revolución libertadora o también revolución fusiladora de 1955.
En la mentalidad infantil del que escribe esta historia, era un mirar al cielo, esperando el tan ansiado retorno. No hacia falta decir de quién, todos los sabían.
Se palpaba en el ambiente la resistencia a los opresores, las primeras pintadas de la JP con la famosa P con la V. Los gremios en la calle. Los libros y cartas que circulaban en secreto. Llegó la orden de Madrid y los militantes se reunían clandestinamente para escuchar su lectura. Verdaderas o no, todo servía.
Estaban prohibidas las imágenes del general y de la Señora, la del escudo partidario, estaba prohibido nombrarlos, se quemaban frazadas por llevar el sello de la fundación que las había donado. Pero en las casas estaban las imágenes prohibidas, el disco con la marchita, La razón de Mi vida y seguramente los manuales de los planes quinquenales.
Un verdadero desafío a la autoridad.
Y radio Colonia con el Avión Negro, a veces acompañado con El tirano depuesto…
Esto no hacia mas que encender los ánimos beligerantes, los anti ya eran definidamente los gorilas aunque a ciencia cierta todavía no se sabe con seguridad porque lo asociaban al pobre animalito.
Algunos memoriosos lo adjudican a una canción que decía: Deben ser los gorilas deben ser. Pero en realidad yo todavía no lo sabía ni me importaba…..eran los gorilas y listo.
Como el avión negro, de donde lo sacaron tampoco se sabe, fue marketing?, fue una idea tirada por un ignoto periodista? Todo puede ser pero no yo no lo sabía ni me importaba.
Para mi representaba el retorno.
La frase de, El retorno del tirano depuesto a mi no me importaba, yo lo único que deseaba era que volviera al país.
Hasta que en 1964 el avión negro se corporizó realmente pero solo pudo llegar hasta el Brasil ya que una orden de la cancillería argentina pidió que lo regresaran a España.
Pero en 1973 el avión negro ya no tuvo razón de ser, el Hombre había vuelto a su país, en un  avión de Ali Italia, El cuerpo de la abanderada del pueblo también.
17 años de exilio y prohibición, de torturas y fusilamientos sepultados por millones de votos.
El Hombre dijo: La primera elección la ganamos por los hombres (las mujeres no votaban), la segunda por las mujeres y la tercera por los niños. Y yo con mi primer voto, fui uno de ellos.

 PD. 17 de noviembre de 1973. Día del militante
Llegada de Peron al aeropuerto de Ezeiza luego de 17 años de destierro. Llovía a cantaros, la dictadura militar hizo lo imposible para que el pueblo militante no fuera a buscar a su líder, pero no lo consiguió.

Luis Viale, la estatua desconocida de la costanera


Todos los que paseamos alguna vez por la costanera sur, vimos una escultura de un hombre, aparentemente mayor, de contextura delgada, con un salvavidas en la mano derecha y en posición de arrojarla a las aguas del río que ya no está.
Siempre me causó interés conocer quién era esa persona, pero nunca investigué. Posiblemente porque cuando iba todavía no había Internet y era mas difícil encontrar algo tan especifico.
Es mas, me podrán decir porque no me fije en la placa que supuestamente debería decirnos quién era pero nunca lo hice, tal vez porque era chico en algunos momentos y en otros porque no se me ocurrió.
Pero siempre hay un momento en la vida para subsanar lo que uno no hizo. Hace poco cuando estuve recorriendo la costanera para sacar fotos, llegue al viejo monumento, lo fotografié y cuando llegué a casa lo primero que hice fue buscar los monumentos existentes en la costanera sur.
Allí me enteré que el misterioso hombre se llamaba Luis Viale al que yo conocía pues una calle de Buenos aires lleva su nombre.
Don Luis, fue un prominente hombre nacido en Génova y fallecido en Buenos aires en 1871, fue uno de los fundadores del hospital italiano del Río de la Plata y del banco de Italia y Río de la Plata.  expuso su vida para salvar gente durante la epidemia de fiebre amarilla, mientras otros huían, Luis llevo a su familia a Moreno y volvió y en 1871 encontró la muerte durante un viaje a la ciudad de Montevideo, el vapor  América se incendió, tras salvar a la señora Carmen Piñedo de Marcó del Pont .
Pero anteriormente había salvado  otro hombre  de las garras del mismo río.
. Luis Viale siempre estuvo ligado al Río de la Plata ya sea por los nombres de las instituciones por el fundadas como por la acciones de salvataje reciente comentadas.
Río que finalmente se llevó su vida

                                                                                                                                        Edgardo R Ieraci